Queridos lectores que bueno es tener contacto con ustedes otra vez. Quiero comentarles que cuando regresé de mi último viaje me encontré con una noticia fuerte, se trata de una Pastora, una mujer de Dios, quien había ido al hospital a orar por los enfermos, al terminar su misión, para volver a casa ella hizo uso del autobús urbano, ya que su esposo estaba usando el carro para otra misión. El autobús arrancó antes de que ella se pudiera sujetar, cayendo hacia atrás, de manera tal que su cerebelo pegó contra una cuneta de cemento, provocándole una conmoción cerebral y hemorragia interna, que posteriormente dio lugar a un coágulo, luego otro.
Desde ese día en que esta bendita mujer de Dios fue ingresada al hospital, ha sido intervenida quirúrgicamente, ha sido sometida a exámenes y tratamientos, de manera que casi milagrosamente ella vive y está en vías de recuperación.
Amigos, algunos se preguntará ¿pero por qué le ocurren estas cosas malas a alguien bueno que andaba haciendo la obra de Dios? No tenemos todas las respuestas, pero lo que si yo puedo decirte es que NO es culpa de Dios, sin embargo, Él está en total control y de lo que el diablo quiso hacer, Dios ha metido Su poderosa mano para tornar todo en bendición.
Tal vez mi querido lector, a ti no te ha ocurrido algo semejante, ni deseo que te suceda, pero es posible que estés pasando una situación difícil, de esas en las que no pareces ver la respuesta o tal vez, tarda mucho en llegar. Quiero decirte que aunque todo se vea muy mal, para ti Hay Una Esperanza, como también la hay para esta mujer y su familia, en medio del trance que todos ellos están viviendo. Yo creo y declaro que la total recuperación y salud plena está por verse ya.